Bundesliga
Repasamos 10 apuntes sobre la biografía del seleccionador alemán que llevó a la Mannschaft a conquistar el Mundial de 2014 en Brasil: este es Joachim Löw.
1) Olfato futbolero
Joachim Löw nació el 3 de febrero de 1960 en Schönau, un pueblo ubicado en el sureste de Alemania. El mayor de cuatro hermanos, a la edad de 17 años terminó su educación escolar para convertirse posteriormente en aprendiz de comerciante. Con un plan B en la mochila para satisfacer a sus padres, Löw pudo enfocarse en su carrera como futbolista profesional y en 1978 se unió al club más grande de aquella región, el SC Freiburg, dando inicio al primero de los tres capítulos que viviría en esa institución.
2) Trayectoria como jugador y entrenador en clubes
Con su 1,80 m de altura no era uno de los delanteros más altos y potentes, pero sí era muy efectivo. Su marca de 83 goles en 263 partidos con el uniforme del Friburgo le mantienen como el segundo máximo goleador en la historia del club. En el lapso que vivió entre su primera y segunda etapa con el SC Freiburg defendió los colores del Eintracht Frankfurt, VfB Stuttgart y Karlsruhe, equipos con los que anotó siete goles en 52 apariciones en la Bundesliga antes de colgar los botines en 1995 para convertirse en entrenador.
Löw nunca fue convocado con la selección absoluta de Alemania y solo tuvo acción en cuatro partidos con la selección sub-21. Sin embargo, la transición del césped a dirigir banquillos le sentó bien. Después de haber sido nombrado entrenador asistente del Stuttgart en 1995, le fueron entregadas las riendas del primer equipo sólo un año más tarde y guio al título de la Copa Alemana de 1997 a un plantel que en este momento tenía a la futura estrella del Bayern de Múnich, el gran delantero brasileño Giovane Élber.
3) Parte de la revolución alemana
Al año siguiente, Löw dirigió al VfB en la final de la Copa de la UEFA; su equipo se vio superado por el Chelsea con un estrecho marcador de 1-0. Después de su etapa en el conjunto suabo se hizo cargo del gigante turco Fenerbahce, del Karlsruhe y regresó a Turquía para dirigir al Adanaspor, todo ello antes de ganar el título de la liga austriaca con el Innsbruck en 2002.
Posteriormente la carrera de Joachim dio un salto cuando Jürgen Klinsmann fue designado como entrenador de la selección alemana en 2004 y eligió a Löw como su segundo, ya que ambos habían compartido estudios en la academia de entrenadores Hennes Weisweiler. Ambos apostaron por cambiar la estructura y la mentalidad del juego alemán e implantaron gradualmente un enfoque más dinámico, alejado del típico juego rocoso que caracterizó por muchos años a la Mannschaft.
4) Hombre récord
El histórico dirigente de la DFB Oliver Bierhoff declaró en su momento que, en la época de Klinsmann y Löw, “se introdujo la velocidad, el pase rápido, los movimientos, la ofensividad y se consiguió que siempre el equipo jugara hacia adelante y no como en el pasado, donde el juego era lateralizado. Y cuando Klinsmann salió en el 2006, la selección ya tenía un sustituto listo esperando las alas”. Palabras reveladoras.
Quizás las señales de que Löw alcanzaría algo especial siempre estuvieron presentes. El técnico suabo se convirtió en la tercera persona en ser entrenador de la selección alemana sin haber vestido antes la camiseta del equipo nacional como jugador (tras Otto Nerz y Erich Ribbeck). Löw acabó con cualquier duda con un triunfo por 3-0 sobre Suecia en su primer juego partido como DT y subrayó su talento con tres victorias consecutivas. Y no solo eso, también se convirtió en el primer entrenador de Alemania en no conceder un gol en sus primeros cuatro encuentros.
5) Una familia futbolera
¿La suerte del principiante? Bueno, la suerte no llegó en la final de la Eurocopa del 2008 o en las semifinales de la Copa del Mundo del 2010 en Sudáfrica, ni tampoco en la Euro 2012. Y mientras su Alemania cayó de manera agónica en estos torneos, Löw aprendió y moldeó la experiencia ganada para sacar ventaja en Brasil 2014 y ser campeones del mundo. Aunque no paró ahí. Löw mantuvo el éxito con la obtención de la Copa Confederaciones del 2017.
Joachim no era el único futbolista dotado en la casa Löw, su hermano menor Markus también jugó para el SC Freiburg (como defensa) y ambos coincidieron en la primera mitad de la campaña 1980/81. Hablando de familia, Löw tenía 17 años cuando conoció a la que sería su esposa. Contrajeron matrimonio en 1986 y estuvieron casados por 30 años antes de separarse en 2016.
6) Un hombre de grandes alturas
El triunfo alemán en Brasil 2014 no fue la primera ocasión en la que Löw estuvo en la cima del mundo. En 2003 subió a otra cima del mundo, la del monte Kilimanjaro en Tanzania, el pico más alto de África. “Fue un ascenso difícil durante cinco días y en la última noche llegué a mi límite, tanto física como mentalmente”, recordó en una entrevista con la revista Süddeutsche Zeitung. “Llegamos a la cumbre en el amanecer y sentí una sensación de felicidad: que casi cualquier cosa es posible en este mundo”.
7) Dulce y amargo
Para Löw, cuando se trata de hablar de nutrición las cosas toman un cariz personal. El técnico de la Mannschaft no teme disfrutar de varias delicias que están fuera de los límites para un profesional de las canchas, como el tabaco. “No creo que nadie coma tantos dulces como yo: pasteles, chocolate, helados, postres,” contó en su día a Die Welt. “También ocasionalmente me tomó uno o dos expresos de más”. El entrenador fue aún más lejos, admitiendo que le gusta relajarse en casa “con un buen plato de spaguettis y un vaso de vino tinto", mientras ve una película. "En casa quiero sentirme en armonía; sin estrés y nada agitado".
8) El discurso perfecto para Götze
Fue el momento que definió décadas de trabajo. En el tiempo extra, André Schürrle asistió con un gran pase dentro del área que llegó a los pies de un Mario Götze recién ingresado al campo. Lo siguiente: control con su pecho a toda velocidad y disparo lejos del alcance de Sergio Romero para hacer estallar el delirio de los aficionados alemanes. TOOOOOOOOR! ¡GOOOL!
9) Podolski, especial para Löw
Fue el momento de Götze el mismo que lo convirtió en una estrella global, pero el secreto de ese momento salió de los labios de Löw quien le dijo al futbolista de 22 años antes de entrar. “Muéstrale al mundo que eres mejor que Messi y que puedes decidir el partido”, reveló el estratega alemán después de la final en Río de Janeiro. Y funcionó. Götze anotó para ganar la Copa del Mundo.
Una curiosidad: Los hablantes del idioma alemán son muy conscientes de las costumbres en la etiqueta social que utilizan para dirigirse a alguien con “Sie” (usted) de manera formal) o el modo informal “Du” (tú). La gente mayor acostumbra a referirse a alguien con el “Du”, pero otros no lo exigen como el entrenador del Bayern Munich, Jupp Heynckes, quien lo hizo recientemente con su homólogo del Hoffenheim, Julian Nagelsmann, o el exdelantero del Colonia y Bayern Munich, Lukas Podolski, quien ha sido el único jugador en dirigirse a Löw de manera informal. “Él me habla de tú”, dijo Löw en una entrevista para la revista Zeit. “Fue algo que comenzó cuando fui asistente de Klinsmann. Aunque no he dado explícitamente permiso a nadie".
10) Socialmente activo
Löw fue muy consciente de su estatus como seleccionador alemán y, con un perfil modesto, se ha desenvuelto como una persona que trabaja por el beneficio de causas comunes. Fue vicepresidente de "Stiftung Jugendfussball", una fundación que apoya proyectos sociales que involucran al fútbol en todo el mundo. También ha apoyado la iniciativa “Ayudamos a África” antes de la Copa del Mundo del 2010 en Sudáfrica y está involucrado con "Plan Internacional", una organización que ayuda a niños desfavorecidos en todo el mundo. A través de esta última institución ha apadrinado a un niño y a una niña en Ghana desde el año 2010.